domingo, 20 de mayo de 2007

El movimiento Sionista

Rome wasn’t born in one day, neither Israel. It was a very long process that involved the emergence of a movement with a social and politician character. This movement began at the end of the 19th century and assembled the whole Jewish population dispersed in the entire world to attain their so longed dream: the restoration of a common native country in their original soil. A dream that they only might achieve after the Second World War.




A menudo vemos en los medios de comunicación la violencia desatada en el conflicto árabe-israelí, muchas veces sin comprender el por qué de esta situación. Atentados a centros comerciales, buses, edificios y otros que traen consigo la muerte de personas inocentes, se han transformado en imágenes habituales en los boletines informativos de la televisión. Pero, ¿Por qué ocurre todo esto? ¿Qué razón puede existir para que los seres humanos se aniquilen entre si?


El conflicto árabe-israelí es un largo proceso que se remonta a los siglos anteriores, pero que tuvo uno de sus periodos más tensos en la formación del Estado Israelí dentro del territorio Palestino, el 14 de mayo de 1948.

Entre uno de los factores preponderantes de este importantísimo acontecimiento histórico, se encuentra el gran movimiento sionista que tuvo lugar en Europa desde finales del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, que trajo consigo entre otros acontecimientos, la masiva migración de judíos a Palestina, con el sueño de la restauración de un nuevo estado que reuniera a todos los judíos.

Sin duda, la vida de los judíos a lo largo de la historia no ha sido fácil: han sufrido persecuciones, discriminaciones, violentos maltratos, matanzas, han sido expulsados de muchos países, entre otros.
El Sionismo, tiene su origen en las profundidades religiosas del judaísmo y en la conciencia colectiva del pueblo judío, basado principalmente en la profunda conexión espiritual entre éste y su tierra de nacimiento histórico, hace más de 4000 mil años cuando Abraham se estableció en Canaán, la tierra de Israel.
Luego de la primera dispersión judía tras la destrucción del Templo de Salomón, símbolo de la Ciudad Santa de Jerusalén, los judíos nunca tuvieron un hogar propio y se encontraban diseminados por todo el mundo donde frecuentemente eran victimas de los abusos anteriormente mencionados. Pese a todo esto, el pueblo judío nunca perdió la esperanza de volver a tener una patria común donde pudieran establecerse en paz y vivir de acuerdo a su elevada cultura religiosa que siempre los caracterizó. Es así como nace el Sionismo.


Herlz y el primer congreso sionista (1897).


No podemos dejar de mencionar a grandes pensadores que a finales del siglo XIX, a través de sus obras contribuyeron notablemente a la masificación de estos pensamientos Sionistas. Entre ellos destacan, Moses Hess con “Roma y Jerusalén” (1860), “Proyecto de colonización de Tierra Santa” (1876) y León Pinsker con “Autoemancipación” (1881).
Pero sin duda, el máximo precursor y fundador de todo este movimiento Sionista fue Teodoro Herzl, quien organizó a los masas y alzó la voz al mundo sobre esta problemática judía, que para él sin duda tenía un fuerte carácter social y debía ser solucionado por la comunidad internacional.
Es así como en su publicación “El Estado Judío”, plantea la formación de un Estado soberano Judío, con el previo consentimiento de las grandes potencias europeas. Estas ideas causaron gran revuelo en toda Europa Oriental, entusiasmando a las masas judías aunque no con toda la aprobación de las autoridades judías.

Luego de esto, Herlz convocó entre el 29 y 31 de Agosto de 1897 al Primer Congreso Sionista, en Basilea, que constituyó la primera reunión judía internacional, a la cual asistieron más de 200 representantes judíos de todo el mundo. En esta reunión, presidida por el propio Herlz, se acordó oficialmente la formación de un nuevo estado de Israel, mediante la elaboración de un documento que puede ser considerado como fundador del movimiento Sionista.

En 1904, fallece Herlz producto de una debilidad cardiaca debido a sus incesantes esfuerzos que realizó luchando por aquella causa que comenzó. Pese a su muerte, el movimiento Sionista no cesó en lo absoluto, y comenzaría a tomar protagonismo en la arena política internacional en las siguientes décadas. Mientras tanto, el número de judíos que emigraban a Palestina aumentaba cada vez más a medida que transcurrían los años.

El primer Congreso Sionista fue sin duda, el inicio de un largo camino en que el pueblo judío, aferrado a esta organización y a otras que surgirían más adelante, lograría su gran anhelado objetivo cincuenta años mas tarde, cuando David Ben Gurion leyera la Declaración de Independencia del nuevo Estado de Israel, en 1948.



“Si lo queréis, no será una leyenda”. Teodoro Herlz.



Sebastián Almendra Pérez, 20 de Mayo de 2007.



http://www.mfa.gov.il/MFAES/MFAArchive/2000_2009/2004/7/Herzl+y+el+Sionismo.htm

http://www.edualter.org/material/palestina/materials.html



1 comentario:

Carolina Valdés Acuña dijo...

Sebastián:
excelente trabajo, sin embargo creo que tu revisión bibliográfica pudo haber sido más completa aún , para de esta forma, poder contrastar más fuentes y puntos de vista.
No obstante, creo que tu trabajo es bastante equilibrado.
Nota: 6.7